Nuestro proyecto sigue adelante con las máquinas simples...
En esta parte del proyecto hemos estado experimentando con las
máquinas simples, tan utilizadas a
lo largo de la historia. Existe una amplia variedad de máquinas simples: la cuña, el
tornillo, la palanca, la polea, el plano inclinado y la rueda y el eje.
Las máquinas simples son
instrumentos o herramientas que nos ayudan a realizar trabajos de una manera
más fácil. Tienen pocas o ninguna parte móvil y funcionan cambiando la
dirección de una fuerza o la cantidad de fuerza necesaria para hacer algo.
Hemos comprobado que utilizamos a diario muchas de ellas: las tijeras, el balancín, las pinzas, la carretilla, la rampa… o que algunas de ellas forman parte de nuestros juguetes.
Nosotros hemos construido y experimentado con algunas de ellas: la palanca, la polea y el plano inclinado.
Un plano inclinado nos permite elevar un objeto con menos fuerza que
si elevamos los objetos directamente hacia arriba. Una rampa es un ejemplo de plano inclinado que habitualmente utilizamos, aunque tardemos más
en subir resulta más fácil. Cuanto menos
inclinado sea el plano, menor fuerza habrá que emplear.
La palanca es una de las máquinas más simples y antiguas. Su
función es amplificar la fuerza que aplicamos a un objeto para poder moverlo
con menos esfuerzo o con más velocidad. Aunque la palanca ya se usaba en la prehistoria,
fue Arquímedes quien descubrió la “ley de la palanca”.
Hemos aprendido a identificar sus partes y observado cuál es la función que tiene cada una de ellas. Ha sido interesante verificar las ventajas que tiene su uso, así como comprobar que cambiando el punto de apoyo modificamos su eficacia. También hemos descubierto que no todas son iguales y hemos aprendido a diferenciarlas.
La polea también es una máquina simple, es un mecanismo que sirve para mover o levantar cosas pesadas. Tiene una rueda que le permite cambiar la dirección de la fuerza. A medida que tiramos de la cuerda, la rueda gira y todo lo que está unido al otro extremo sube. Hemos descubierto que existen poleas fijas y móviles y que su ganancia no es la misma, e incluso que se pueden combinar formando un polipasto, aumentando así su efectividad.
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